George Stephenson perfeccionó el diseño de la máquina de vapor para ferrocarril, después de construir la locomotora Rocket en 1829. Vaticinó que el país contaría con una completa red ferroviaria.
Elo ferrocarril en Cuba Surgió desde la etapa colonial
La historia ferroviaria de Cuba comenzó en 1830, siendo colonia española, cuando el gobernador general de Cuba Francisco Dionisio Vives crea la Junta de Caminos de Hierro para estudiar la construcción del Ferrocarril La Habana-Bejucal-Güines. En diciembre de ese año el proyecto se paraliza y es retomado en 1832 cuando el habanero Claudio Martinez de Pinillos, conde de Villanueva, es nombrado presidente de la Real Junta de Fomento de La Habana. El conde de Villanueva gestiona ante la corona española y obtiene el 12 de octubre de 1834, la autorización de la reina de España Isabell II, para construir la primera línea de La Habana a Bejucal. La Real Junta de Fomento llevaría a cabo la construcción del ferrocarril consiguiendo un empréstito de 2 millones de pesos negociado en Inglaterra. La obra tuvo al norteamericano Alfred Kruger, como ingeniero principal.