Mi Musa la siento pura engalanando suspiros, brotando de ellos versos como un manantial crecido. Eres hechicera, o ninfa, no sé como describirlo.. Pero al pensar en usted mis versos son un delirio. Me siento enriquecido con el sabor de tu encuentro, mi alma es un zafiro enarbolando tu cielo. He contemplado de cerca todo tu colorido, que en lustre vence al diamante más brillante, dejando al sol agonizante. Al rayo de luz que desprende tu mirada, mi Musa con su guitarra, mil versos de amor te canta. Yo me siento agradecido al contemplar tus encantos, se por qué te amo tanto y me siento bendecido. Eres paz para mi alma, eres luz y armonía, eres la estrella fugaz que me ilumina mis días. Roberto Fernández
Mi Musa la siento pura
engalanando suspiros,
brotando de ellos versos
como un manantial crecido.
Eres hechicera, o ninfa,
no sé como describirlo..
Pero al pensar en usted
mis versos son un delirio.
Me siento enriquecido
con el sabor de tu encuentro,
mi alma es un zafiro
enarbolando tu cielo.
He contemplado de cerca
todo tu colorido,
que en lustre vence
al diamante más brillante,
dejando al sol agonizante.
Al rayo de luz
que desprende tu mirada,
mi Musa con su guitarra,
mil versos de amor te canta.
Yo me siento agradecido
al contemplar tus encantos,
se por qué te amo tanto
y me siento bendecido.
Eres paz para mi alma,
eres luz y armonía,
eres la estrella fugaz
que me ilumina mis días.
Roberto Fernández